Bueno antes de empezar con el relato, solo quería comentar que esto era un proyecto en el que iba a participar en un foro, pero que no llegué a presentar, pero me gustaria seguir en ello, asi que voy a ir publicando lo que tengo escrito y si me sigo inspirando pues lo continuaré.
(SERI)
Ignoré sus palabras y regresé para abrirle la puerta.
(SERI)
Llevaba todo el día lloviendo y estaba aburrida en casa, tenía planes para
salir, pero en un cambio repentino de opinión decidí coger el teléfono y
prepararme para una multillamada…
_ ¡Hola chicas! ¿Estamos todas? _ pregunté.
_ Aquí Laura reportándose. ¿Por qué una multillamada? ¿No nos vamos a ver
en un rato?
_ Judit , ¡presenteee! ¡Qué ganitas tengo de veros!
_ ¡Chicas yo ya estoy! _ dijo Angie.
_ ¿Falta mi prima? Yo la llamo _ dijo Judit.
_ ¿Si? Chicas espero que sea importante…estaba ocupada… _ dijo Ari con ese
tono que todas interpretamos como que la habíamos interrumpido mientras
estaba con Sergio.
_ Bueno chicas, ya estamos todas, os propongo un cambio de planes…como
llueve mucho y estoy sola en casa…¿qué os parece veniros a pasar un par de
noches a mi casa? _ propuse sin mucha
esperanza de que contestaran en positivo.
_ ¡Por mí perfect! No me apetecía mucho salir con la que está cayendo y
tengo muchas ganitas de estar con vosotras…que os tengo que contar muchas
cosas._ dijo Judit.
_ ¡Yo me encargo de la cena! _ dijo Laura, siempre que podía aprovechaba
para ofrecerse a cocinar en ocasiones así, lo único malo es que cocinaba fatal,
por lo que nunca la dejábamos hacerlo.
_ Laura sería mejor que me dejaras a mi la cocina y tu te encargaras de
traer las bebidas._sugirió Angie entre risas.
_ Bueno vale, acepto. Pero también me encargo del postre.
_ ¡Concedido! _ dijimos las cuatro a la vez.
_ Yo me encargo de los chicos.
_ ¡EHHHHHHH! Para el carro Ari,
¿quién dijo algo de invitar a los chicos? Siempre que vienen los chicos
termina todo mal…el plan era estar nosotras juntas y ponernos al día de todo,
que seguro que las vacaciones han dado para mucho…
Así siguió nuestra conversación durante otros 20 minutos. Cuando colgamos
tenía asumido que esta noche aparecerían Ari y Sergio y por supuesto los amigos
de Sergio, quisiera yo o no quisiera, por que así era Ariadna de testaruda; era
la mayor de todas y a sus 21 años había no había muchas cosas que le faltaran
por hacer. Le encantaba cambiar de look a menudo y le encantaba emparejarnos
con los amigos de Sergio. Tenía la figura
perfecta, estilo y unos ojazos verdes que enamoraron a Sergio desde que se
vieron por primera vez en el instituto. Había dejado de estudiar con 16 años y
trabajaba en la recepción de una peluquería.
Angie tenía 19 años y era la más pequeña y era todo ternura en ella; daba
más de lo que podía de sí misma cuando quería algo y cuando los demás la
necesitábamos nos apoyaba en todo. Era una estudiante ejemplar y su meta era
ser dueña del hotel de sus padres, por lo que estaba en la Universidad estudiando
Hostelería y Turismo.
Lo más destacado de Laura era su impulsividad y lo extremadamente
sentimental que era. También era la más extrovertida de todas nosotras y le
encantaba navegar por Internet. En todos los grupos de amigos siempre hay algún
“Hacker” pues ella era la nuestra, era capaz de encontrar cualquier información
en menos de 3 minutos. Estudiaba Informática en la Universidad , pero su
verdadera vocación era la cocina y a parte de su carrera universitaria estaba
aprendiendo a cocinar en una academia. Todas sabemos que un día lo logrará y a
sus 20 años tiene toda la vida por delante.
Y bueno, Judit; no
sabría que decir de ella, lo tenía todo a sus 20 años. Dejó de estudiar cuando
terminó su Bachillerato porque no tenía claro que era lo que quería hacer.
Trabajaba vendiendo teléfonos móviles y por su horario desde que empezó a
trabajar la vemos poco, pero siempre que tenía un día libre nos llamaba para
vernos. Era muy directa y decía lo que pensaba sin preocuparse de las
consecuencias, pero era una persona que sabía escuchar y con la que podías contar en lo bueno y en malo. Era la más tímida del grupo y la más
enamoradiza, nunca se rendía en el amor.
En cuanto a mí…solo diré que a mis 20 añitos adoro a mis amigas y no podría
vivir sin ellas.
Aún no había terminado de arreglarme cuando sonó el telefonillo. No podían
ser ellas ya…no había transcurrido ni 10 minutos desde que habíamos colgado. Me
dí el último retoque y me dirigí al pasillo.
_ ¿Sí?
_ Hola Seri, soy…
_ Sé quien eres, lo sé de sobra. ¿Qué narices haces aquí? Te dije que no volvieras por aquí.
_ Escúchame por lo menos, por favor. Tengo algo importante que decirte.
Suspiré…no sabía que hacer…si debía escucharle…así que me disponía a
colgar…cuando gritó:
_ ¡Voy a intentarlo con Judit!
Y sin saber que otra cosa decir contesté:
_ Vente esta noche a las 10; podrás verla. _ y colgué.
Estas últimas palabras retumbaron en mi mente: “¡Voy a intentarlo con
Judit!” ¿Por qué me molestaban? Yo sabía lo que mi mejor amiga sentía por Aaron
desde los 14 años y también sabía lo que él sentía tanto por ella como por mí y
tenía una cosa muy clara: no le iba a romper el corazón a mi mejor amiga. ¿Pero
yo tenía que romper el mío? Se suponía que no rompería mi corazón porque no me
gustaba Aaron, o por lo menos, eso pensaba yo, pero esas palabras seguían retumbando
en mi mente: “¡Voy a intentarlo con Judit!”
Aaron, Judit y yo nos conocimos en nuestro primer año de
instituto; los tres éramos nuevos y eso nos unió mucho, todo lo hacíamos
juntos: salíamos, hacíamos los deberes, estudiábamos… Pero un año después
pasaron dos cosas que cambiaron nuestra amistad: Judit le confesó a Aaron que
estaba enamorada de él desde el primer día que pasamos los tres juntos, ella
nunca recibió respuesta, pero lo que nunca supo fue que Aaron me confesó que
estaba enamorado de mí pocas semanas antes y que incluso quedamos varias veces
a solas, yo estaba dispuesta a intentarlo con él, pero cuando Judit le confesó
sus sentimientos…decidimos dejarlo, no queríamos hacer daño a nuestra amiga…así
que Aaron desapareció de mi vida para siempre.
Eran casi las 8 de la tarde y ya estaba sonando el
telefonillo. Eran Judit y Ari.
_ ¡Hola Xurrita! ¡Tengo que contaros tantas cosas de mi
viaje! Ha sido el mejor de toda mi vida. _ dijo Judit abrazándome.
Y yo no podía dejar de pensar en las palabras de Aaron: “¡Voy
a intentarlo con Judit!” y ella parecía que lo sabía, venía guapísima y con
cambio de look, se había cortado el pelo y había cogido un bronceado precioso
durante las vacaciones. Llevaba puestos sus vaqueros favoritos con una de sus mil
camisetas, pero había escogido la más escotada, así Aarón no podría resistirse
a sus encantos cosa por la que yo me tendría que alegrar, ¿me alegraba?
Volvió a sonar el telefonillo, eran Angie y Laura, como
siempre, llegaban tarde. Hubo ronda de besos y abrazos y Judit comenzó a
relatarnos lo sucedido en su viaje, mientras yo seguía dándole vueltas a las
palabras de Aarón sin prestar mucha atención hasta que escuché:
_ Chicas, ¡creo que me he enamorado! He conocido al chico
perfecto, creí que nunca me iba a pasar y que siempre estaría enamorada de
Aarón...pero por fin he conocido a alguien que me corresponda.
Y de repente me empecé a hacer mil preguntas: ¿qué pasará
esta noche? ¿Dejaría escapar Judit al amor de su vida o tendría el valor de
rechazarle y comenzar de nuevo con el chico del que nos había hablado? ¿Podía
yo permitir que Aarón se estrellara delante de todos nosotros? No me quedó más
remedio que dejar que todo siguiese su curso.
_ ¿Quién ha preparado la cena?_ pregunté para intentar
despejar mi mente.
Todas me miraron como si hubiese cometido un crimen y
Laura me respondió:
_ La ha preparado Angie, ya que no me dejasteis
prepararlo. Como dije, he traído el postre y como homenaje a nuestra recién
llegada amiga he traído fondeé de chocolate con frutas. _ puso su cara más
traviesa y añadió: _ Solo se comerá en compañía de los chicos. Ari te acordaste
de decírselo a Sergio, ¿verdad?
_ Por supuesto_ contestó Ari a carcajadas.
_ Chicas, ¡sois increíbles! vamos a cenar...
Y a las 10 en punto sonó el telefonillo...
_ ¿Sí?_ contesté
_Soy yo_ y Aarón ya estaba aquí. En mi cabeza volvieron a
resonar sus palabras: "Voy a intentarlo con Judit".
En menos de un minuto sonó el timbre y Judit abrió la
puerta, y allí estaba él, me atrevería a decir
que más guapo que nunca, pero de repente mi amiga le cerró la puerta en
las narices.
_ Tía ¿cómo no me avisaste de que venía?_ me preguntó a
voz en grito.
_ Ho...Hola, ¿qué le ha pasado?
_ No lo sé...será mejor que se lo preguntes tu mismo_ me
apresuré a contestar.
Fin capítulo 1
Excelente, me gusto! Solo tuve que interpretar algunas expresiones ya que soy de Mexico, pero muy bien
ResponderEliminarsaludos.
@garguetac
gracias! si no entiendes alguna expresión solo pregúntame! Un saludito desde Madrid!
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